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sábado, 1 de marzo de 2025

«UNA DE NUESTRAS PRINCIPALES RESPONSABILIDADES ES QUE ESTA REGIÓ́N SIGA SIENDO UN CONTINENTE DE PAZ»

Yamandú Orsi asumió como nuevo presidente de Uruguay 
dio un discurso agradeciendo a exmandatarios 
y a su antecesor, Luis Lacalle Pou

 Yamandú Orsi, tras prestar juramento como nuevo presidente de la República
Oriental del Uruguay. (Foto/La Diaria)

Uruguay
- "Yo Yamandú Orsi, me comprometo a desempeñar lealmente el cargo que se me ha confiado, y a guardar y defender la Constitución de la República”. Eso fue lo que manifestó Yamandú Orsi a las 14.25 del 1 de marzo de 2025, comenzando oficialmente su mandato como nuevo presidente de Uruguay.

Ante eso, el presidente de la asamblea general en funciones Alejandro Sánchez -previo a juramentar a la vicepresidenta Carolina Cosse-, lo invistió en el cargo.

“Señor Yamandú Orsi, en virtud de la declaración que usted acaba de realizar ante la Asamblea General de acuerdo a lo establecido en el artículo 158 de la Constitución de la República, queda usted investido en calidad de presidente de la República”, dijo Sánchez, antes de pasar a juramentar a Cosse, y bajo el aplauso de toda la Asamblea General.

Tras asumir como vicepresidenta, Cosse tomó el mando de la Asamblea General como su presidenta e invitó al presidente Orsi a dirigirse al público: “Una vez más como cada cinco años, [Uruguay] les demuestra al mundo y a nosotros y nosotras la salud de nuestra ejemplar democracia”, expresó la recientemente investida vicepresidenta.

El primer discurso

El presidente Yamandú Orsi dio su primer discurso en la Asamblea General, tras ser investido como mandatario luego de ganar las elecciones en 2024. Al comienzo de su oratoria, el frenteamplista hizo mención a la conmemoración de los 40 años de democracia que celebra Uruguay este 1° de marzo.

Orsi abrió su discurso recordando que “un día como hoy pero hace 40 años Uruguay recuperaba su democracia y atrás quedaba el período más doloroso de nuestra historia contemporánea, marcado por la persecución política y la crueldad humana como método de gobierno y por el saqueo económico como parte central de ese proyecto político”. Recalcó que aún “hay secuelas que continúan hasta hoy”, por lo que “es tan justo como imprescindible mantener intacto el compromiso con la libertad, la verdad y la justicia”.

El novel presidente también destacó la importancia de los partidos políticos en la contribución con la vida democrática del país. Remarcó que es necesario “atesorar” la construcción del sistema político uruguayo “en tiempos donde proliferan las expresiones de antipolítica y las lógicas excluyentes”, y llamó a ser “siempre adversarios pero nunca enemigos”. “Alejémonos todo lo posible del cinismo y de la frivolidad para no tener que lamentar el descreimiento en la política y sus consecuencias”, planteó.

“Corresponde también agradecer a los expresidentes Julio María Sanguinetti, Luis Lacalle Herrera y José Mujica”, dijo Orsi en referencia a los dirigentes políticos que estaban presentes.

También mencionó al mandatario saliente, Luis Lacalle Pou, “por sostener y alimentar esta construcción democrática de manera ininterrumpida”.

Orsi destacó que no llega al gobierno “con la lógica de imponer”. “Personalmente, me rebelo contra el país de las dos mitades, sepan que nunca supe llevarme bien con los muros ni tampoco con los ideológicos”, añadió.

En ese sentido, apuntó que no llega al Poder Ejecutivo con la “verdad revelada”. “No comienza un tiempo de refundación, sino de nuevas propuestas y de construcción permanente”, sostuvo y añadió que el país necesita “retomar la senda del crecimiento económico”.

Con respecto a la seguridad, el mandatario indicó que Uruguay “necesita reconstruir la convivencia”. “No habrá contemplación alguna con el delito, pero bien sabemos que será insuficiente y hasta demagógica si no atendemos las causas”, reparó.

También mencionó la necesidad de combatir la pobreza infantil y atender los problemas de salud mental. “Debemos ir al encuentro de aquellos que históricamente quedan olvidados”, añadió Orsi.

Hacia el final de su discurso, Orsi se dirigió a los visitantes extranjeros que lo acompañaron en su asunción y sostuvo: “Desde un país como el nuestro, enclavado en el sur de América, queremos sumar esfuerzos para contribuir con la estabilidad y la paz en un mundo cada vez más complejo y cambiante”.

Destacó el avance de las acciones y acuerdos del Mercosur, el reforzamiento de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños, y la participación cada vez más activa en la Organización de Estados Americanos. A su vez, adelantó que la profundización de las relaciones y la multiplicación de los acuerdos con “los grandes países de referencia de nuestro mundo en forma bilateral y multilateral” serán algunas de las “banderas” que llevarán en los próximos cinco años.

“Una de nuestras principales responsabilidades es que esta región siga siendo un continente de paz, con mayor estabilidad, equilibrio social y económico, y que seamos capaces de un mejor proceso de integración”, afirmó el presidente.

Al cierre, Orsi prometió honrar el juramento que tomó “con dedicación, con escucha atenta, con fervor y con trabajo incansable”. “No seré vacilante ni indiferente. Para algunas causas no hay tiempo que perder y las he colocado entre mis prioridades de gobierno”, aseguró, y agregó: “Es tiempo de abrir las puertas a la esperanza, con la convicción inquebrantable de un país que sabe cuál es el rumbo, con el legado de los que lucharon y nunca bajaron los brazos”.

Sobre el final de su discurso, volvió a referirse a los detenidos desaparecidos y dijo que el país “gozará de buena salud cuando todas las familias uruguayas sepan dónde están sus familiares desaparecidos”.

“Vamos a contribuir a un mejor Uruguay, larga vida a la República, a la democracia, a los partidos políticos, que nuestro país siga siendo un faro de convivencia”, finalizó.

Informe: El Observador y La Diaria (Montevideo) y Agensur.info

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