Nacionales - Con la ayuda de sus aliados y un grupo de radicales, el oficialismo logró este miércoles en la Cámara de Diputados blindar el veto del presidente Javier Milei a la Ley de Movilidad Jubilatoria. La conversión de un grupo de legisladores respecto a junio pasado, cuando se aprobó la media sanción, permitió que La Libertad Avanza bloqueara los dos tercios de los presentes que necesitaban los bloques opositores para insistir con la norma, según el artículo 83 de la Constitución Nacional.
La votación resultó con 153 votos positivos, 87 negativos y 8 abstenciones. Hubo 8 ausentes. Con esa cantidad de diputados sentados, la oposición requería de 166 votos a favor para sostener la ley. Le faltaron 13. Durante la primera aprobación, los dos tercios se habían conseguido con 160.
Sin mayores problemas para conseguir el quórum, tal cual se preveía, la reunión arrancó a las 11.15 con la presencia de todos los espacios. Luego de la jura Nancy Ballejos, la habilitación del tratamiento del veto se votó a mano alzada, sin inconvenientes, pues fue avalado tanto por la oposición como por el oficialismo. Al no haberse convocado a reunión de Labor Parlamentaria, algo que algunos reclamaron a Martín Menem, titular del Cuerpo, se pasó a un breve cuarto intermedio para que los jefes de bloques acordaran la lista de oradores y el debate comenzó 11.53.
La sesión había sido solicitada la semana pasada por diputados de la UCR, Encuentro Federal y la Coalición Cívica. Si bien varios opositores sabían que alcanzar el número de los dos tercios de los presentes para la insistencia de la ley era complicado, consideraron que había que convocar a discutir el tema antes de que se enfriara y se perdiera entre otras cuestiones. O antes de que el Poder Ejecutivo lograra persuadir a más legisladores.
Así las cosas, los impulsores de la ley siempre admitieron por lo bajo que los números estaban “muy finos”, pero venían con el envión ganador y se sentían optimistas. La Libertad Avanza sumaba, además, derrotas parlamentarias en las últimas semanas.
En la previa la mirada estaba puesta en la clave que serían las ausencias -que achicarían las mayorías necesarias para un lado y para el otro- y también en las posturas que tomarían los diputados que responden a sus gobernadores, tanto radicales como los de, por ejemplo, Innovación Federal (que, efectivamente, pasaron del voto a favor a la abstención). Pero llegando a la sesión, el panorama cambió y el oficialismo comenzó a asegurarse apoyos para sostener el veto.
La situación terminó de inclinarse a favor del Gobierno con la reunión de este martes en la Casa Rosada entre el presidente Milei y cinco diputados de la UCR, que después de ese encuentro confirmaron que darían vuelta su voto. Solo uno de ellos no había estado en junio, pues todavía no era diputado.
Tras la foto, que reavivó una fuerte interna dentro de la bancada radical, todo vestigio de optimismo opositor se esfumó. El cambio de posición de un grupo de legisladores fue parte de varios discursos durante la sesión.
La ley vetada
La ley vetada establecía una recomposición del 8,1% en las jubilaciones, de modo de complementar el 12,5% de incremento adicional otorgado en abril por el DNU 274/24 del Gobierno, de modo de alcanzar a compensar lo que fue la inflación más alta del año, la de enero, con 20,6%.
Asimismo, se establecía una fórmula de movilidad para la actualización de los haberes previsionales que contemplaba el índice de inflación como referencia, al igual que el DNU. En estos dos aspectos el oficialismo se había mostrado a favor con un dictamen de minoría en el Senado, y se llegó a pensar que el veto podría haber sido parcial, sosteniendo el Poder Ejecutivo estos artículos. Pero finalmente no pasó.
Además, la norma establecía un aumento del 50% por variación salarial (RIPTE) en marzo de cada año; y una garantía para el haber mínimo en 1,09% lo equivalente al valor de la Canasta Básica Total.
Por otro lado, se instruía a la ANSeS a cancelar la totalidad de las deudas que mantiene con las provincias cuyos sistemas previsionales no fueron transferidos al Estado nacional, como así también con los beneficiarios del SIPA que cuentan con sentencia firme dentro de un plazo de seis meses, prorrogable por seis más.
El pasado 2 de septiembre, a través del decreto 782/24, el Poder Ejecutivo vetó totalmente la ley y fundamentó que el proyecto sancionado por el Congreso “es manifiestamente violatorio del marco jurídico vigente en tanto no contempla el impacto fiscal de la medida ni tampoco determina la fuente de su financiamiento”.
“Dar cumplimiento a la medida sancionada por el Honorable Congreso de la Nación dificultaría gravemente la sostenibilidad de las finanzas públicas de la República Argentina, ya que significaría la necesidad de obtener una fuente de financiamiento extraordinaria, imprevista, a efectos de afrontar su costo, sea a través de deuda pública o aumento de impuestos”, agregó el Gobierno.
El debate
En su debut fuera del bloque de La Libertad Avanza, la mendocina Lourdes Arrieta expresó que “los jubilados no pueden ser considerados pasivos fiscales”, y arremetió contra el oficialismo al recordar que cuando militó para dicho espacio “fue bancando a nuestro presidente y creyendo que el ajuste iba a ser para la casta, pero no para los jubilados”.
El santacruceño Sergio Acevedo adelantó su voto a favor de la ley y de rechazo al veto, al asegurar que las razones fiscales “no son ciertas, hay una especulación absolutamente absurda” y habló de la necesidad de “romper con la creciente desigualdad que se cierne en el pueblo argentino”. “El presidente debería ahorrarse los adjetivos y ser responsable”, enfatizó.
Desde el Frente de Izquierda, Nicolás Del Caño denunció que “estamos asistiendo a un nuevo escándalo como vivimos con la Ley Bases, donde aparecieron en el Senado con las valijas repartiendo cargos” y opinó que existe “un manto de sospechas de corruptela de todo tipo” en torno a los apoyos al veto.
“Con estas prácticas del toma y daca de la casta, este Gobierno está actuando en contra de las mayorías trabajadoras y en particular de los jubilados”, continuó y afirmó que para “los más ricos sí hay plata”. “Milei lo que hace es beneficiar a sus amigos, como el millonario (Marcos) Galperín; un presidente que dijo que venía contra la casta y es la mayor estafa electoral”, sumó.
Por la Coalición Cívica, el diputado Maximiliano Ferraro realizó un enfático discurso contra sus pares que cambiaron el voto respecto a junio pasado y criticó el “transfuguismo político”. “Hoy creo que darse vuelta es claramente darle la espalda a los jubilados. No le encuentro una sola razón objetiva, política, material, ni cambio en la realidad de los jubilados en Argentina que justifique que algunos diputados voten contrario al mandato de Juntos por el Cambio, voten contrario a lo que votaron el pasado 5 de junio en este recinto”, señaló.
Al anticipar la abstención del bloque de Innovación Federal, Agustín Domingo dijo que “no es cierto que la fórmula para los jubilados sea inviable fiscalmente, o como dijo el presidente, que sea obra de degenerados fiscales”. Sin embargo, el rionegrino adelantó que junto a sus compañeros no iban a “votar en contra de esa decisión política que tomó el presidente, pero tampoco vamos a convalidar”.
El diputado de Encuentro Federal Nicolás Massot planteó que “no debiera ser una obligación esta idea de que ‘no hay plata’” de cara a la visita del presidente para presentar el Presupuesto. “Hay plata, y hay bastante. De nosotros depende y autorizamos cómo se aplica eso y es lo que estamos haciendo hoy acá”, manifestó.
El bonaerense recordó que el Gobierno proponía un recorte a jubilaciones y pensiones del 0,4% y luego, con la Ley Bases, querían derogar la fórmula jubilatoria, medida que fue rechazada por el Parlamento. También criticó el DNU que “le puso un punto y medio de ajuste a los jubilados casi el cuádruple”.
“La fórmula anterior era mala y había perjudicado a los jubilados, Unión por la Patria entendió eso. Hubo la oportunidad acá de votar casi por unanimidad una fórmula de movilidad, pero el Gobierno optó por el conflicto, no por la política del acuerdo”, cuestionó y defendió que con la ley se propone devolverle el 0,3% que “el Gobierno les manoteó a los jubilados”. “Si a este Gobierno le va bien en la baja de la inflación, vamos a estar condenando a los jubilados a que ganen una miseria para siempre, porque están en el momento mínimo de su incidencia sobre el producto. Nunca ganaron menos los jubilados en términos reales y, si la inflación realmente baja y no vuelve a subir, van a ganar una miseria para siempre. Es muy relevante que haya un componente salarial para que los jubilados participen del crecimiento futuro”, advirtió.
En su intervención durante el debate, el jefe del bloque Encuentro Federal, Miguel Pichetto, reprochó al Gobierno no haber tenido en cuenta los antecedentes de la historia reciente y alertó sobre las consecuencias fiscales que tendrá el rechazo a esta ley en materia de litigios judiciales.
“Vamos a insistir; queremos ser coherentes con lo que hemos votado en la sesión” del 5 de junio, confirmó y rechazó de manera tajante que se los considere degenerados fiscales y, por el contrario, aclaró que “hemos actuado con mucha materia en la materia”. En el final, le advirtió al Gobierno que “este universo previsional argentino hay que tenerlo en cuenta y el tema en la sociedad tiene un impacto. Este es un mensaje que le hago llegar al Gobierno. Empezar a comprender algunos temas que no es solo el ajuste fiscal donde hay que inmolarse, sino también la previsibilidad económica y la previsibilidad fiscal”.
Aunque no participó de la reunión con el presidente Milei en Casa Rosada se preveía que la santacruceña radical Roxana Reyes cambiaría su voto. Y efectivamente así lo confirmó en el recinto, al adelantar su abstención. Para justificar el cambio, cargó contra el kirchnerismo. “Estamos todos de acuerdo que quienes nos pusieron en este brete, quienes nos trajeron acá, el kirchnerismo, que primero lo hizo en mi provincia durante 30 años, y luego lo hizo en la Nación, dejó en esta situación al sistema previsional; metiendo por la ventana, con su conocido populismo, a jubilados que nunca habían aportado, ahí le fueron a meter la mano a los jubilados”, manifestó.
En su discurso cuestionó que, a través de la ley, “a un Gobierno nuevo le mandan a pagar en seis meses todos los juicios que ustedes no pagaron”. “El Gobierno tendría que haber hecho un veto parcial”, consideró, pero lanzó: “También es cierto que van a tener que ir a terapia muchachos. Ganó Javier Milei, no ganamos nosotros, entonces el que gobierna y el que fija el plan económico es Javier Milei”.
De la otra vereda dentro del bloque de la UCR, el bonaerense Pablo Juliano aseveró: “Yo no voy a cambiar mi voto, yo voy a votar igual que la vez pasada, porque fue mi bloque el que construyó esta alternativa que se convirtió en ley”. “Los que se llenan la boca hablando de la base de sustentación tienen una urna en la cabeza”, se quejó y desafió que “los que se sacan fotos muevan sus bancas, tengan el coraje político de lo que hacen afuera sostenerlo acá adentro”.
A su turno, el jefe de bloque del Pro, Cristian Ritondo, ratificó la postura de su bancada y cargó contra los integrantes de la Unión Cívica Radical: “Háganse cargo de haber votado con el kirchnerismo”. Por otro lado, argumentó que el proyecto vetado propone un déficit fiscal de “6.000 millones para este año y de 15.000 millones para el que viene”. En tal sentido, defendió el ajuste del Gobierno nacional y sumó que este texto atenta contra “el esfuerzo que vienen haciendo todos los argentinos”.
El presidente del bloque de Unión por la Patria, Germán Martínez, habló de la necesidad de que los jubilados tengan una mejora en sus haberes a la hora de pensar en sus ingresos y realizó un repaso de todo lo actuado en el transcurso de estos meses con este tema. “El diablo disfrazado de fuerzas del cielo metió la cola, y se empezó a llevar diputados de todos los bloques. Y la alcanzó con una mayoría mínima”, enfatizó el santafesino y dijo que el Gobierno alcanza ese logro “colgado del travesaño”.
También de Unión por la Patria, el diputado Itaí Hagman apuntó contra el presidente Milei y sostuvo: “Vengo a desmentir que acá estemos poniendo en peligro el equilibrio fiscal porque fue el propio Gobierno nacional quien presentó el 12 de diciembre que el ajuste previsional iba a tener un 0,4% del PBI y lo triplicó”.
Asimismo, se dirigió a la bancada oficialista y aseveró que “van a evitar la derrota legislativa, pero no van a poder evitar la derrota política”. “Milei miente al decir que esto afecta el 1,2% del PBI porque, en perspectiva, la política de Milei es el congelamiento y la estamos congelando a los niveles más bajos de la historia”, indicó el porteño.
Sobre el cierre de su intervención, expresó que “solo estos seis meses, la jubilación estuvo por debajo de la canasta básica” y que “no siempre fueron miseria, pero desde 2017 vienen a la baja y Milei no revirtió el declive”. “Los que voten en contra de la insistencia, votan el congelamiento”, cerró.
Referente liberal dentro del oficialismo, el diputado nacional José Luis Espert también lanzó críticas contra la bancada de Unión por la Patria y sumó que “estamos reunidos y no puedo creer que el kirchnerismo le siga mintiendo a la gente como le miente usando a los jubilados para desestabilizar un programa de gobierno, pero no lo van a lograr”.
Asimismo, pidió hacer memoria y apuntó contra CFK: “Tuvimos como presidenta a una multiprocesada por chorra que además firmó un memorándum con Irán para ocultar la responsabilidad de los más 100 muertos en los atentados contra la Embajada de Israel y la Amia”.
Se cruzó con Leopoldo Moreau, a quien le dijo “quédate quieto que te va a dar un bobazo”. Para terminar, recordó la gestión de Alberto Fernández y el exministro de Economía, Martín Guzmán: “Pedí reclusión perpetua para ellos porque son asesinos y delincuentes”.
“Ustedes le robaron a los que estaban aportando en las AFJP, son chorros, y la fórmula de ustedes produjo una caída del 30%, pero la fórmula de Milei propone mejoras del 10”, explicó Espert, quien aseveró: “Ustedes jubilaron a 4 millones de personas sin aportar”.
Para el cierre de las exposiciones antes de la votación, el jefe de bancada oficialista, Gabriel Bornoroni, reiteró que la oposición “utiliza a los jubilados como ‘carne de cañon’”. También, mencionó los vetos presidenciales de los últimos 41 años y remarcó que “Milei está cumpliendo el rumbo de campaña”.
En el cierre, manifestó que la oposición “utiliza a los jubilados al decirle que le damos más, pero le sacamos con la inflación”, y los llamó “caraduras porque tenían a los jubilados cagados de hambre”.
Por último, explicó que “se necesitan 4 trabajadores por jubilado y hoy tenemos 1,8” e invitó a debatir una reforma laboral. Remarcó que será vetado cualquier proyecto que ponga en peligro el equilibrio fiscal y concluyó al grito de “viva la libertad carajo”.
Informe: Parlamentario.com
0 comments :
Publicar un comentario