Economía - El Gobierno de Alberto Fernández recibió este lunes con cierto alivio el índice de inflación que publica el INDEC, dado que muestra una desaceleracón de los precios. La información oficial confirmó que la inflación fue de 8,3% en octubre, luego del alarmante 12,7% de septiembre y el 12,4% de agosto. No obstante, la cifra sigue muy por encima del 6,3% de julio y del 6% de junio. El nuevo dato de septiembre es, también, positivo para la campaña de Sergio Massa, el ministro de Economía y candidato presidencial del oficialismo.
Además, los precios acumulan un avance de 120% en lo que va de 2023.
Con el nuevo índice conocido este lunes, se confirmó que la inflación de los últimos 12 meses alcanzó el 142,7%.
Para noviembre
En los últimos días comenzaron a difundirse las primeras estimaciones para noviembre, a cargo de varias consultoras privadas, basadas en mediciones semanales.
En tal sentido, existe consenso que noviembre arranca fuerte, debido en gran medida a que se combinan el final de los acuerdos de precios negociados post PASO con la incertidumbre que imprime el panorama electoral, donde a pocos días del ballotage, las encuestas predicen prácticamente un empate técnico.
En el caso de la consultora EcoGo, su primer registro semanal trepa hasta el 5,1%, lo cual implica una aceleración en el margen de 2,8 puntos porcentuales. A partir de este dato, la proyección del nivel general de la inflación de noviembre se ubicaría así en 12,2% mensual después de un octubre donde el IPC habría sido levemente inferior al 10%.
Desde la consultora apuntan que "si bien el dato aún es preliminar, marca el ritmo de un mes que se proyecta complejo tanto por el fin de los acuerdos de precios que llevaron productos esenciales como naftas, carnes, etc. al alza, como por la búsqueda de cobertura frente la incertidumbre que genera la definición presidencial - continuidad o ruptura- en un contexto de alta volatilidad".
En el inicio de este mes, algunas de las remarcaciones en el rubro alimentario excedieron por lejos los acuerdos firmados por el Gobierno.
En el inicio de la primera semana del mes, algunas de las principales compañías del sector fueron a la secretaría de Comercio. Ahí les pidieron que los aumentos de precios no pasaran del 5%. Convinieron que eso podría respetarse hasta el día de las elecciones, pero que el martes 21 -primer día hábil tras el balotaje- tendrían que volver a reunirse para examinar la situación.
Hay una cuestión indisimulable: el nuevo "dólar exportador" -70% cotización oficial y 30% contado con liqui- impacta en los precios finales.
El tipo de cambio que el Gobierno les reconoce a los exportadores -en torno a $500- encareció las materias primas. El paso siguiente es que ese mayor costo termine impactando en los precios de los productos terminados. Es lo que empezó a suceder.
En este arranque de noviembre se evidencian fuertes ajustes en rubros como los lácteos -en el cual hay aumentos de hasta 20% y 25% en quesos y yogures, por ejemplo- y también en las yerbas, de hasta 20%, un primer retoque que continuará en las próximas semanas.
En el equipo económico hay preocupación por el rápido traspaso a los precios finales de aquella medida tendiente a encontrar dólares en el mercado.
También hubo fuertes ajustes en algunas marcas de fideos. Los incrementos se sintieron en los autoservicios y almacenes de barrio, que están por fuera de los precios controlados por el Gobierno.
Informe: iProfesional
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