Economía - La justicia de los EE.UU. dejó firme el fallo en contra de la Argentina por la expropiación de YPF. Así el país deberá pagar u$s 16.099 millones a Burford Capital por la recompra de acciones que se realizó en 2012 para reestatizar la mitad de la empresa.
El fondo litiga contra la Argentina en los tribunales de Nueva York por el tratamiento desigual que el Estado les dio a los accionistas minoritarios al momento de la estatización de la petrolera en relación de los importes que pagó al REPSOL.
Los fondos presentaron ante la justicia norteamericana las especificaciones que tenía el estatuto de YPF al momento de la adquisición, donde debía hacerse una oferta pública para comprar las acciones, algo que el gobierno argentino no hizo.
El Grupo Petersen vendió la posibilidad de litigar por estas razones al fondo Burford para que se hiciera cargo de los costos del proceso judicial, que ahora se encuentra con sentencia firme de la jueza Loretta Preska en medio de críticas hacia la posición argentina sobre la negociación que se realizó.
El Gobierno ya anticipó que apelará la decisión ya que esta resolución se tomó en primera instancia, todavía resta conocer la determinación de otras instancias para que se deba concretar el pago a Burford.
En el fallo que se conoció hace algunos días, la jueza tomó palabras del entonces ministro de Economía y actual gobernador bonaerense, Axel Kicillof, sobre cómo ponderaba la ley argentina por sobre los estatutos de la empresa.
"La República obligó a los demandantes a otorgarle un préstamo masivo después de expulsar por la fuerza a los miembros del directorio de YPF, el 16 de
abril de 2012, lo que provocó que los representantes de Repsol en YPF huyeran del país. El Sr. Kicillof declaró descaradamente que sería ‘estúpido' cumplir ‘la ley de la propia YPF' o ‘respetar sus estatutos'", consideró en el texto.
El estudio Kellogg, Hansen, Todd, Figel y Frederick criticó al país en las últimas horas por la postura que tomó a la hora de negociar y consideró que "lamentablemente, se ha negado a consultar con las Demandantes de
buena fe para preparar una presentación conjunta. En su lugar, la República ha convertido un simple ejercicio de lectura del fallo en un ataque colateral a la orden de este Tribunal".
Como es costumbre
en los EEUU, las partes suelen reunirse para unificar posturas en la sentencia, pero como cada una de las defensas optó por presentar distintas consideraciones, la jueza redactó con parte de ambas esta sentencia que será apelada por la Argentina.
Informe: EC
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