"Hemos superado
muchos obstáculos para llegar aquí",
ha dicho el líder norcoreano al
inicio de la reunión.
Kim Jong-un y Donald Trump, en el primer saludo protocolar entre ambos, dando inicio a la histórica cumbre en Singapur. (Foto/AP) |
Mundo - "Hemos
superado muchos obstáculos para llegar aquí", ha dicho Kim Jong-un.
"Vamos a tener una gran relación", ha apuntado Donald Trump. Con un
breve apretón de manos, de doce segundos exactamente, y un posado para la
prensa, los dos han empezado este martes su cumbre histórica en Singapur, la
primera entre un presidente de EE. UU. y un líder norcoreano.
Ante un fondo de banderas estadounidenses y norcoreanas, en
el patio del hotel Capella en la isla de Ventosa -un antiguo comedor de
oficiales de la época colonial reconvertido en albergue de lujo-, los dos
líderes mostraron un semblante distendido, ajustándose estrictamente al guion.
La escena estuvo cuidadosamente coreografiada. Kim y Trump
llegaron al mismo tiempo al punto de encuentro, en extremos opuestos del
estrado, y avanzaron a la vez hacia el punto central, desde donde se saludaron.
Tras las fotos, y a una indicación con la mano de Trump, los
dos mandatarios se dirigieron a la habitación privada donde mantendrán un
encuentro a solas, acompañados solo por sus traductores, durante 45 minutos.
Ambos caminaron con paso relajado, mientras volvían a estrecharse la mano e
intercambiaban sus primeros saludos e impresiones.
La cumbre no tenía el simbolismo de la reunión intercoreana
de Panmunjom el abril, cuando Kim tomó de la mano al presidente surcoreano,
Moon Jae-in, para cruzar juntos la línea de demarcación. Pero la emoción estaba
presente en el ambiente. Kim pareció nervioso durante los primeros segundos,
antes de recuperar la entereza.
"Me siento muy bien", dijo Trump al comienzo de su
conversación. "Vamos a tener un gran diálogo y creo, un tremendo éxito,
será tremendamente exitoso y es mi honor; tendremos una relación magnífica, no
me cabe duda".
"Los viejos prejuicios y prácticas actuaron como
obstáculos en nuestro camino, pero los hemos superado y aquí estamos hoy",
ha contestado Kim. "Efectivamente", le replicó el inquilino de la
Casa Blanca.
A su reunión a solas le sigue una conversación en la que se
incorporarán las respectivas comitivas, y un almuerzo de trabajo. La mesa de
teca en la que deliberan está cargada de historia. Casi centenaria, este mueble
es un préstamo de la Galería Nacional de Singapur a Estados Unidos
especialmente para esta cumbre.
A las 16.00 horas de este martes (03A.00 hora argentina), y
con la cumbre concluida, Trump tiene previsto ofrecer una rueda de prensa en el
mismo hotel Capella para informar de los resultados.
Acompaña a Trump una comitiva en la que se encuentran, entre
otros, su consejero de Seguridad Nacional, John Bolton; su secretario de
Estado, Mike Pompeo, y su jefe de Gabinete, John Kelly. Junto al líder coreano
se encuentran su hermana, Kim Yo-jong, su hombre de confianza, Kim Yong-chol,
el jefe de Gabinete Kim Chang-son, y el jefe de la delegación que se reunió en
Panmunjom con representantes estadounidenses, Choe Son-hui.
La reunión está rodeada de una seguridad extrema por tierra,
mar y aire: además de cientos de policías uniformados en el lugar, el espacio
aéreo también está vigilado por drones. Dos buques de guerra de Singapur y
varias patrulleras controlan las transitadas aguas en torno a la isla de
Sentosa.
Informe: El País
No hay comentarios:
Publicar un comentario