Rodolfo Urtubey
quiere un acuerdo de gobernabilidad que beneficie a la Nación y a las
provincias en sus reclamos.
Esa fue la condición que puso el senador Rodolfo Urtubey,
hermano del gobernador de Salta y presidente de la Comisión de Acuerdos, clave
para el tratamiento de los pliegos de jueces, diplomáticos y embajadores.
"Hagamos un acuerdo de gobernabilidad, poniendo todos
los temas sobre la mesa, que incluya todo, como la derogación de la Ley
Cerrojo, la aprobación del acuerdo con los holdouts, el tema de la Corte, la
coparticipación, todos los temas que son objeto de reunión entre Gobierno y las
provincias", planteó Urtubey.
La derogación de la ley cerrojo impide negociar mejores
condiciones de pago con los acreedores del país que rechazaron ingresar a los
canjes del Gobierno, entre ellos los fondos buitres que ahora reclaman cobrar a
partir del fallo del juez Thomas Griesa.
Por eso Griesa y el mediador Daniel Pollack exigen a Macri
que antes de cerrar cualquier acuerdo debe derogar esa ley en el Congreso, como
también la de “pago soberano”, una creación de Cristina Kirchner para pagar la
deuda en el país y no arriesgar embargos en New York.
Para tener mayoría simple, Macri requiere de al menos una
parte del bloque FpV del Senado, que con 40 miembros tiene 3 más que el quórum
pero está virtualmente partido entre kirchneristas y peronistas ortodoxos, más
identificados con los gobernadores.
Los primeros difícilmente ayuden y los últimos quieren
negociar. "Queremos un acuerdo de gobernabilidad expreso y explícito, pero
que no adquiera un cariz de una especie de toma y daca o mercado persa",
aclaró Urtubey.
Los gobernadores peronistas reclaman la restitución del 15%
de la coparticipación que se gira a Anses, a partir del fallo de la Corte
Suprema que declaró ilegal ese giro, ante planteos de Córdoba, Santa Fe y San
Luis.
Macri aceptó engrosar las arcas de esas provincias, pero
derogó el decreto de Cristina que ampliaba ese beneficio al resto, un paso que
tarde o temprano debería dar si los gobernadores lo exigen ante la Corte
Suprema.
Miguel Pichetto, jefe de bloque FpV, recordó que seguirán
pidiendo esa plata en la reunión que mantuvo con Marcos Peña, Rogelio Frigerio
y el resto de los jefes de bancada.
La primera urgencia de Macri es que los senadores avalen la
llegada de Corte de Horacio Rosatti y Carlos Rosenkrantz, que tendrán su
audiencia pública recién el 3 de marzo.
En este mes, el presidente prometió retomar las obras
públicas paralizadas en las provincias, que amenazan con miles de puestos de
trabajo en la construcción. Confía en que así ablandará a los gobernadores para
que instruyan a sus senadores que colaboren.
Pero después vendrá la negociación por la ley cerrojo y ahí
ya no tendrá argumentos para evitar el debate por la coparticipación.
Urtubey también fue cauto respecto a los jueces de la Corte,
aunque aceptó que ambos tienen “trayectorias sólidas”.
"Lo que tenemos que ver es la idoneidad" de ambos
candidatos que "es muy distinto a la afinidad ideológica-política".
"Es prematuro decir si vamos a avalarlos, no hemos
hecho una pulseada de ese tema, falta mucho. Muchos senadores no conocen (a los
candidatos) y van a esperar la audiencia pública", relativizó el
presidente de la Corte Suprema.
0 comments :
Publicar un comentario