NAVAL BOLIVIANA
Por Frank Schultze
El almirante José Luis Villegas puede ver el mar solamente
en los cuadros de óleo en su oficina. Desde este despacho, da órdenes a sus
5.000 marineros, cadetes y oficiales. Tiene unos sesenta barcos distribuidos en
las orillas del Lago Titicaca y en los ríos fronterizos en la jungla. Cuenta
además con donaciones de China: dos barcos de patrulla ya bastante oxigenados y
una nave hospital.
Mientras tanto, los marineros de la base naval más alta del
mundo enseñan a nadar en agua fría en el Lago Titicaca, como si se prepararan
para un ataque inminente.
En la entrada a la base en Guaqui, del lado sur del
lago, un monumento muestra a un soldado boliviano atacando a un enemigo chileno
que ya está por caer. Debajo, una inscripción proclama: “Lo que un día fue
nuestro, nuestro otra vez será”.
Frank Schultze
(Daun, Alemania, 1959) estudió fotoperiodismo en Dortmund con Adolf Clemens.
Desde 1992 ha fotografiado para las principales revistas y periódicos de
Alemania y para muchas publicaciones internacionales. Entre ellas, GEO, Stern, Spiegel, Times, Focus, Brigitte,
Natur, Das Magazin, Weltwoche, y Die
Zeit.
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