El candidato
oficialista mantiene una diferencia de 11 puntos pero
no le alcanza para consagrarse
en primera vuelta.
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| Tabaré Vázquez (izq.) mantiene una importante ventaja sobre Luis Lacalle Pou pero no le alcanza para consagrarse en primera vuelta. |
Uruguay - Un
total de 2.620.791 uruguayos concurrirán a las urnas el domingo desde las 8 de
la mañana (7 de Argentina) para elegir al sucesor de José Mujica a partir del 1
de marzo, en una elección que marcará también la renovación completa de los 99
miembros de la Cámara de Diputados y de los 30 Senadores.
El candidato presidencial del oficialismo y ex mandatario
entre 2005 y 2009 Tabaré Vázquez pidió en el cierre de campaña del jueves
"un voto de confianza para asegurar el tercer triunfo del Frente Amplio,
que es el mejor proyecto político para que la gente viva mejor".
Ante unas 300.000 personas, de acuerdo al cálculo de los
organizadores, que cubrieron la rambla montevideana de banderas rojas, azules y
blancas, Vázquez, médico oncólogo de 74 años, auguró que el 26 de noche pedirá
"festejen, uruguayos, festejen, que la victoria es de ustedes", en
alusión a la célebre frase que lanzó al asumir como Presidente por primera vez
el 1 de marzo de 2005.
Su compañero de fórmula, el ex presidente de la petrolera
estatal Ancap, Raúl Sendic, destacó durante el acto de cierre que se trata
"del mejor momento de la historia del Uruguay" y opinó que
"ninguna fuerza política fue capaz de transformar al país como el Frente
Amplio", por lo que en línea con el slogan oficialista, aseguró que "Uruguay
no se detiene".
Las últimas encuestas publicadas antes de la veda, muestran
que Vázquez alcanza un promedio de 43%, frente al 32% que muestra el candidato
nacionalista, Luis Lacalle Pou, por lo que el FA no alcanzaría la mayoría
absoluta de los votos emitidos con los que podría imponerse sin necesidad de
balotaje.
Lacalle Pou, diputado de 41 años, aventuró durante su cierre
de campaña del jueves, en Las Piedras, que desde la noche del 26 "no será
solo el candidato del Partido Nacional" y se mostró confiado en
"representar a gran parte de la mayoría nacional", frente a la
posibilidad de buscar acuerdos de cara al eventual balotaje del 30 de
noviembre.
Hijo del ex presidente "blanco" Luis Alberto
Lacalle (1990-1995), el candidato reforzó en su última aparición de campaña el
mensaje "Por la positiva", con el que trazó una estrategia de evitar
confrontaciones con el oficialismo y aseguró que "La vida hay que vivirla
por la positiva y es la única manera de unir al país. Queremos un país unido
por la positiva, es la única manera en que vamos a merecer encabezar la
jefatura del gobierno y del Parlamento".
El jueves, en otro punto de la rambla montevideana, también
dio el punto de cierre a su campaña el candidato del Partido Colorado y senador
Pedro Bordaberry (54), quien aparece tercero en las encuestas con un promedio
del 15% de intención de voto según Cifra, Equipos, Factum y Radar.
Hijo del expresidente civil de la dictadura, José María
Bordaberry, el candidato del Partido Colorado ha hecho ingentes esfuerzos por
asociar su figura sólo a su nombre de pila, obviando el apellido.
"Pedro", es la única palabra recortada sobre su foto en los afiches
proselitistas.
Bordaberry, que ha hecho de la inseguridad su lema central
de campaña en base al slogan "Vamos a vivir en paz", afirmó junto a
su compañero de fórmula Germán Coutinho que "la del domingo es una
decisión de las más trascendentes de los últimos 25 años, clave para los
próximos 5, 10, 15 años".
"El domingo decidimos volver a vivir en paz o este
camino de inseguridad. Cambiar la educación o mantener las desigualdades. El
domingo sí a la baja, sí a la rehabilitación y no la situación actual de
denuncias de malos tratos a los menores. Sí a cuidar los derechos de todos y
especialmente de los honestos, de la víctima", expresó, en referencia al
plebiscito que también definirá ese día si Uruguay acepta una reforma
constitucional para bajar la edad de imputabilidad de 18 a 16 años como impulsó
el PC.
En el terreno legislativo, el oficialismo aspira a conservar
la mayoría parlamentaria que tiene desde 2005, aunque las últimas encuestas
marcan que debería obtener cerca de un 46% y esperar que el partido
Independiente no mejore sus dos diputados actuales y que los tres partidos que
se presentan en la elección (Ecologista Radical Intransigente, de los
Trabajadores y Unidad Popular) no logren representación parlamentaria.
Según calculó el ministro de la Corte Electoral Gustavo
Silveira en diálogo con Télam, para obtener un senador, se deben conseguir unos
78.000 votos en todo el país, mientras que para obtener una banca en la Cámara
de Diputados, se precisan unos 26.200 votos en Montevideo (la más alta) y 7.400
votos en Flores (donde se requieren menos).
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