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lunes, 20 de octubre de 2014

"Cristina no es socia de Lázaro Báez"

Sin que nadie se lo preguntara, Ricardo Echegaray hizo esta afirmación sobre la relación presidencial con el empresario kirchnerista investigado.

Ricardo Echegaray desvinculó a
Cristina de Lázaro Báez. (Foto: DyN)
Nacionales - Ricardo Echegaray volvió a transitar un sendero pantanoso con una declaración que no está claro si fue un desliz o en envenenado mensaje interno, que se produce justo cuando resiste una embestida del ministro de Economía, Axel Kicillof, para desplazarlo de la AFIP.

"La presidenta Cristina Fernández de Kirchner no es socia de Lázaro Baez“, afirmó sin que nadie le preguntara, en una conferencia de prensa convocada para referirse a la investigación que enfrenta el empresario kirchnerista Lázaro Báez, por la compra de facturas apócrifas.

Kicillof y La Cámpora quieren desalojar a Echegaray del Gobierno y sostienen en privado que el titular de la AFIP resiste ese desplazamiento apelando a la información sensible que maneja sobre los movimientos económicos de todo el sistema de empresarios vinculados a la familia Kirchner.

Echegaray brindó este lunes una conferencia de prensa en la que confirmó que el presunto testaferro de los Kirchner emitió facturas apócrifas en Bahía Blanca. 

"Parecería que el único caso de facturas truchas fuera el de Lázaro Báez”, se quejó el funcionario. “Pero quiero remarcar, porque no sé si es con intencionalidad o falta de conocimiento técnico, que la presidenta Cristina Fernández de Kirchner no es socia de Lázaro Baez“, afirmó en su frase más sinuosa.

No es una novedad. Echegary suele jugar fuerte cuando se siente amenazado, como hizo cuando sin piedad -en otra conferencia de prensa- hundió a su viejo compañero de la Ucedé, el vicepresidente Amado Boudou, que intentó adosarle la responsabilidad por el escandaloso "rescate" de la papelera Ciccone.

En su conferencia de este lunes, Echegaray aseguró que las empresas del grupo Báez “están bajo fiscalización” por la utilización de esas facturas apócrifas y negó que se hayan cambiado a los funcionarios que investigaron esas firmas. “Los mismos que la iniciaron, terminaron la investigación”, sostuvo.

Afirmó además que este tipo de facturas "nacen de necesidades del sector privado, son usufructuadas por el sector privado y terminan en el sector privado".

El escándalo estalló tras una investigación del diario La Nación firmada por el periodista Hugo Alconada Mon. Echegaray explicó que "a este sistema algunos lo utilizan para ajustar Ganancias" y recordó que "la evasión por facturas apócrifas es un tipo penal agravado" y reveló que existen "unas 750 causas penales por facturas apócrifas".

La nota de Alconada Mon reveló que Echegaray debió relevar a toda la filial de Bahía Blanca luego que comprobara maniobras que presuntamente involucraban a Lázaro Báez.

Presión de fondos buitre

La conferencia de Echegaray se dio en el marco de la presión que están ejerciendo los fondos buitre sobre las cuentas que se sospecha Lázaro abrió en el exterior, para lavar el dinero que obtuvo de obras públicas presuntamente otorgadas de manera fraudulenta.

Las amenazas abiertas se agudizaron cuando los holdouts publicaron un mapa que detalla las maniobras financieras que aparentemente hizo el supuesto testaferro de la familia Kirchner para girar plata al extranjero.

El abogado del fondo NML, Denis Hranizky, advirtió que poseen más información para develar y que ya tendrían identificadas las cuentas ligadas a la familia Kirchner. De ahí el nerviosismo que atraviesa en estos momentos el más alto nivel del gobierno.

En ese sentido, según contó este lunes el periodista Carlos Pagni, Cristina y Máximo se habrían reunido este fin de semana en la quinta de Olivos para tratar el tema.

Según pudo saber LPO, la capacidad financiera de los fondos buitre les permitió contratar a dos compañías londinenses especializadas en el rastreo de cuentas negras por todo el mundo. Se trata de un servicio muy exclusivo que en el mercado local no suele contratarse por su elevadísimo costo.

Las declaraciones de Echegaray contradicen las palabras del secretario General de la Presidencia, Oscar Parrilli. A fin del año pasado, el mismo Alconada Mon reveló que el dueño de Austral Construcciones le había alquilado tres hoteles de Calafate por más de 14 millones de pesos.

El alquiler de habitaciones para mostrar que está en su capacidad máxima es una práctica habitual en las maniobras para lavar dinero, que permite que dinero negro ingrese en el circuito formal, que así se “blanquea”.

En ese entonces, Parrilli reconoció que existieron estos oscuros negocios, aunque aclaró que se trataba de “negocios entre privados”.

Lázaro era un ex empleado del Banco Nación de Santa Cruz hasta que conoció a Néstor Kirchner y se convirtió de la noche a la mañana en un magnate de la obra pública santacruceña, cuando el ex presidente administraba la provincia.

Luego, cuando Kirchner accedió a la Presidenta, los contratos que recibió Lázaro Báez escalaron al infinito y le adjudicaron obras para construir rutas en todo el país. En esa faena  recibió innumerables denuncias por rutas  mal construidas o inconclusas. Por ejemplo, la autovía que va de Trelew a Puerto Madryn nunca se terminó y por ese motivo se le retiró la concesión.

Informe: LPO

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