Los números “no
pertenecen” a la Presidencia, según Oscar Parrilli, pero si a él mismo, a Aníbal
y Alberto Fernández y a Florencio Randazzo, entre otros.
Parrilli dio a conocer el informe enviado a la jueza Servini de Cubría. |
Nacionales - El
Gobierno le contestó este lunes públicamente a la jueza María Servini de Cubría
a quiénes correspondían las líneas telefónicas de la Casa Rosada que aparecen
en la causa de la efedrina y, sin hacer acusaciones puntuales, detalló que
fueron de áreas de distintos funcionarios y ex funcionarios, entre ellos los
presidenciables Daniel Scioli, Sergio Massa y Julio Cobos.
“Ninguno de los números indicados en el oficio es un discado
directo entrante, razón por la cual es imposible identificar interno u oficina”,
resaltó el Secretario General de la Presidencia Oscar Parrilli, al leer esta
tarde ante la prensa el oficio que se estaba respondiendo a la jueza.
No obstante, el Gobierno le aclaró a la magistrada que se
podría “identificar quien realizó una llamada a un determinado interno contando
con el número de origen externo y la fecha y hora aproximada” y viceversa: “Es
decir desde un interno de la Casa Rosada a un teléfono externo fijo o móvil,
debiendo contarse el número de destino, fecha y hora aproximada”.
Se trató de un informe sumamente técnico mencionando cada
una de las líneas telefónicas obrantes en la causa que están siendo
investigadas por Servini de Cubría, quien había amenazado el viernes pasado con
allanar la Casa Rosada si no le respondían a quienes pertenecían esas líneas
telefónicas con las cuales se habrían comunicado personas vinculadas con el
tráfico de efedrina, sustancia usada para elaborar drogas sintéticas.
Precisamente, el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, se
quejó del “tono intimidatorio o amenazante” de la jueza, mientras que el
secretario de Seguridad, Sergio Berni, opinó que si la jueza decía que los
llamados existieron, debía de tener razón.
Horas después Parrilli dio un detallado informe sobre los
números de teléfono sobre los cuales les habían pedido informes: algunos ya
habían sido dadas de baja (4374-0154, 4374-0424, 4373-0306 y 4374-0512), otros “nunca”
pertenecieron a la Presidencia (4124-6330 y 4373-0120) y otro grupo estaba
relacionado a distintas áreas a través de centrales desde las que se podían
hacer decenas de comunicaciones simultáneas.
Esos números, entre 2004 y 2008, respondían a áreas que
estaban a cargo de actuales presidenciables como Sergio Massa (cuando fue jefe
de Gabinete), Daniel Scioli y Julio Cobos (cuando fueron vicepresidentes) y
Florencio Randazzo (hoy ministro del Interior y Transporte), dijo.
La lista de funcionarios aludidos incluye al propio Parrilli
(que daba el informe), Aníbal y Alberto Fernández (ex ministro del Interior y
ex jefe de Gabinete), Carlos Zannini (Secretario Legal y Técnico de la
Presidencia), y Juan Carlos Mazzón (de la Coordinación General de Asuntos
Políticos e Institucionales de la Unidad Presidente), entre otros.
Si bien no lo dijo, el funcionario dejó entrever que será la
jueza la que tendrá que analizar entre quiénes se produjeron las llamadas
investigadas si tiene datos más concretos.
De acuerdo a la causa, Augusto Abraham, el mayor importador
de efedrina del país, llamó varias veces en 2007 a un abonado de la Casa Rosada
(4344-3600) mientras que desde el Servicio de Comunicaciones de la Casa Militar
llamaron al socio de éste, Guillermo Manfredi, según trascendió de fuentes del
caso.
Se investigan además un centenar de llamados que realizó
Miguel Zacarías, ex secretario del ex jefe de la Sedronar José Granero, a
diferentes números de la Rosada, donde trabajaban sus hermanos: Rubén (en
Protocolo) y Luis Zacarías (en el área privada de la presidenta Cristina
Fernández).
El informe del ingeniero Alejandro Nitti, director de
Comunicaciones de la Casa Rosada, explicó el procedimiento mediante el cual se
realiza una llamada saliente o entrante de cualquiera de los internos de las
oficinas del personal.
Allí advirtió que “ninguno de los números indicados en el
oficio es un discado directo entrante, razón por la cual es imposible
identificar interno u oficina”, pero aclaró: “No obstante, y en caso de ser
requerido, se puede identificar quien realizó una llamada a un determinado
interno contando con el número de origen externo y la fecha y hora aproximada”.
Según precisó, “la central posee una herramienta que permite
identificar los movimientos que se generaron entre ese número externo y el
interno y la oficina correspondiente. También en sentido inverso, es decir
desde un interno de la Casa Rosada a un teléfono externo fijo o móvil, debiendo
contarse el número de destino, fecha y hora aproximada”.
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