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| Amado Boudou, cada vez más comprometido ante la Justicia. |
Judiciales - Hace
dos lunes una mujer llegó hasta el cuarto piso de los Tribunales de Comodoro
Py. Pasó absolutamente inadvertida. Había pedido ampliar su declaración
indagatoria. Se presentó ante el juez Claudio Bonadio, y dejó un escrito.
Era Agustina Seguín, quien fuera pareja de Amado Boudou
desde 1996 hasta 2007. El vicepresidente y Seguín fueron procesados por Bonadio
en septiembre pasado por la falsificación de los documentos de un viejo auto
Honda rojo modelo 1992.
La mujer fue a los Tribunales con Cecilia Christello, su
nueva abogada, y responsabilizó al vicepresidente por los trámites por los
cuales terminaron ambos procesados. Era Seguín quien en los años de su relación
con Boudou conducía el auto Honda rojo.
En julio pasado cuando Boudou se presentó a indagatoria ante
Bonadio, dejó un escrito en el que deslindó responsabilidades. Acusó por las
irregularidades a un "red de gestores" que se encargó de la papelería
y señaló que lo hicieron "por expreso pedido de la señora Agustina Seguín".
En la presentación que realizó hace dos semanas, y que
Infobae reconstruyó a partir de diversas fuentes del caso, Seguín aseguró que
contrató a uno de los gestores involucrados en el expediente y lo hizo por
pedido de Boudou.
El escrito comienza con una descripción de la relación que
mantuvo con Boudou. Contó que tuvo la intención de formar una familia con el
vice, hecho que le llevó a confiar sin dudas en su ex pareja. Pero esa
situación parece haber cambiado ya que a partir de las causas judiciales en las
que está involucrado Boudou, Seguín dice ver las cosas de una manera diferente
a cuando estaban juntos.
Luego de la aclaración sobre la vida personal se refirió al
los papeles del Honda CRX Del Sol color rojo. Explicó que fue Boudou quien
aportó el dinero para pagar los honorarios del gestor. Y que antes de que
comenzaran la relación en 1996 era Boudou quien conducía el auto. Y que fue el
actual vicepresidente quien le dio la documentación que ella entregó al gestor.
Aseguró que no revisó los papeles porque entonces confiaba en Boudou y que
debieron haber sido los gestores o el dueño del auto quienes controlaran la
documentación.
Seguín aludió a estos episodios para defenderse. Argumentó
que no se la puede acusar a ella por lo del Honda rojo cuando Boudou hizo lo
mismo en otras dos ocasiones. La mujer explicó que ella no tuvo relación con
las inscripciones irregulares de los otros domicilios falsos, por ende tampoco
con el que la llevó al procesamiento.
Y para respaldar los dichos sobre las irregularidades en los
DNI adjuntó una nota publicada en Clarín, por el periodista Nicolás Wiñazki
-uno de los que investiga a Boudou- en la que hablaba de los tres casos de los
domicilios del vicepresidente.
La presentación finaliza con una síntesis. Seguín aseguró
desconocer que el trámite de inscripción del Honda fuera irregular y que lo
único que hizo fue entregar y recibir la documentación por pedido de Boudou.
Seguín se presentó ante Bonadio el 8 de septiembre pasado.
Ahora podrá esgrimir los mismos argumentos ante la Sala II de la Cámara Federal
porteña que es la que revisa el procesamiento dictado por el juez.
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