El expresidente Sarkozy permanece detenido con graves cargos. |
Internacionales –
En un marco en que su partido, la Unión
por un Movimiento Popular (UMP), se encuentra amenazado por divisiones,
derrotas electorales y deudas, el expresidente francés Nicolás Sarkozy
permanece detenido acusado de “posible tráfico de influencia” y "violación
de secreto de instrucción”. La detención del exmandatario ha conmocionado a la
opinión pública de Francia y, principalmente, a los círculos políticos de ese
país.
La justicia francesa detuvo este martes al exmandatario
francés Nicolás Sakozy para interrogarlo por esa práctica ilegal y
"violación de secreto de instrucción". Se lo investigaba por la
financiación de su campaña electoral con aportes de Kaddafi y por “posible
tráfico de influencia”.
Sarkozy se encuentra detenido desde las 8:00 (3:00, hora en
Argentina) en la sede de la Oficina Central de Lucha Contra la Corrupción y las
Infracciones Financieras y Fiscales (OCLCIFF, por sus siglas en francés) en
Nanterre, en el sureste de París.
El exmandatario, de 59 años, permanecerá en esa situación al
menos 48 horas, aunque los jueces podrían solicitar extender la detención por
otras 24 horas, con el objetivo de dar con "una red de informantes"
en el seno de la policía y la Justicia, susceptible de anoticiar al
expresidente sobre los procesos judiciales que pueden amenazarlo.
El lunes, la justicia gala había comenzado a cerrar el cerco
en torno a Sarkozy con la detención de su abogado y de dos importantes
magistrados acusados de haber advertido a Sarkozy de que la Justicia había
intervenido su teléfono móvil, quienes continuaban siendo interrogados por los
mismos cargos que el expresidente.
Las escuchas al ex jefe de Estado fueron ordenadas en
septiembre de 2013, en el marco de otra investigación preliminar en torno a las
acusaciones de financiamiento de su campaña presidencial de 2007 por parte del
exlíder libio Muammar Kaddafi.
La investigación busca ahora dar con "una red de
informantes" y las sospechas se incrementaron a fines de 2013, cuando los
investigadores constataron un tono lacónico al teléfono y descubrieron que
Sarkozy poseía otro teléfono celular con un nombre falso, adquirido por su abogado
para mantener la confidencialidad en sus conversaciones.
La detención de Sarkozy tiene lugar en momentos donde su
partido, la Unión por un Movimiento Popular (UMP), se encuentra amenazado por
divisiones, derrotas electorales y deudas que pueden llevarla al quiebre y la
colocan en peligro de eclosión.
Pero además de la investigación sobre el posible tráfico de
influencia y el posible financiamiento de su campana electoral con dinero
libio, la Justicia gala mantiene abierta varias investigaciones donde figura el
nombre del exmandatario.
La semana pasada, la Fiscalía de París abrió una
investigación sobre el financiamiento de la campaña presidencial de 2012,
apuntando a la costosa organización de sus actos, financiados por su partido
para poder pasar el límite de gastos permitido.
Además, en el caso sobre el arbitraje que benefició al
controvertido empresario Bernard Tapie en detrimento del Estado, la Justicia
también investiga los contratos que el gobierno de Sarkozy realizó con
institutos de encuestas durante su mandato (2007-2012).
0 comments :
Publicar un comentario