Brasil apenas pudo lograr
un sufrido punto en el empate 0-0 con México, que le jugó de igual a igual.
Neymar apenas pudo eludir las marcas de los defensores de México en un partido que terminó en empate 0-0. |
Brasil – El scratch
brasilero no pudo quebrar a una sólida defensa de México, con un arquero
inigualable y que, en los minutos finales, pudo haberse alzado con un triunfo
que hubiera sido muy doloroso para el seleccionado local.
Con un arquero como Guillermo Ochoa, la selección mexicana
pudo eludir el supuesto vendaval que iba a significar la escuadra brasilera y
comenzó a jugarle de igual a igual al equipo de Scolari, que tuvo en Neymar
algunos brillos, muy pocos, e insuficientes para vencer la valla de Ochoa.
Neymar, de este modo, no llevó mayor peligro al área de
México, ni los pases de Oscar hicieron mella en la solidez defensiva del equipo
mexicano. Dani Alves estuvo descolorido y más de una vez fue superado por los
hábiles delanteros mexicanos que arremetieron varias veces contra el arco
defendido por Julio César.
El segundo tiempo cambió muy poco y el encuentro se hizo de
ida y vuelta, convirtiéndose en un partido emocionante donde ninguno de los dos
equipos se dieron tregua. Ochoa, en dos oportunidades más, tapó los disparos de
Neymar y Julio César desvió un remate de Andrés Guardado que tenía destino de
gol.
Al culminar los 90 minutos y con 3 de tiempo suplementario, Guardado
casi logra vencer el arco de Brasil pero la sólida atajada de Julio César
frustró este intento y un minuto después, el guardavalla brasilero desvió el
último disparo de México.
Este punto, beneficia a ambos conjuntos que esperarán con
mayor tranquilidad sus compromisos. Para Brasil significa una nueva decepción
aunque este empate es “mais que nada” para los brasileros. Para los jugadores,
sin embargo, tuvo “sabor a nada…”
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