Citó a los delegados
de DUS a una nueva reunión para el 30 de junio. Las advertencias de los
maestros de continuar el paro después de las vacaciones
de invierno si no se logra un acuerdo definitivo.
La imagen que el Gobierno ya no puede soportar: docentes reclamando en las calles de toda la provincia. |
Por José Montenegro
La desacreditada Intergremial que acordó salarios vergonzosos
para la administración pública provincial, volvió a reunirse el último lunes
con el ministro de Educación de Salta, Roberto Dib Ashur para, supuestamente, “avanzar
en distintos temas de interés del sector”, esto es, discutir sobre aguinaldo,
concursos, titularizaciones, entre otros aspectos. Oficialmente, nos se informó
nada sobre salarios docentes.
En un principio, esta reunión no fue bien recibida por la docencia
salteña, mayoritariamente agrupada en Docentes Unidos de Salta (DUS), que llevó
a cabo una de las huelgas más prolongadas del sector produciendo una verdadera
crisis que el Gobierno aún no puede resolver.
La molestia de DUS fue porque la Intergremial ya ha quedado,
prácticamente, sin ningún tipo de autoridad para acordar aspectos relacionados
con la situación laboral de la docencia, toda vez que no ha participado en las
luchas que llevaron a cabo los maestros y que significaron, en los hechos, la
púnica vez que el Gobierno aceptó que la cuestión salarial estaba deprimida por
la inflación y que debía responder a esa exigencia a costa de profundizar la
crisis.
Por eso es que abrió las puertas de las conversaciones
aunque la última reunión con el sector de Docentes Unidos fue el 15 de mayo,
incumpliendo la promesa de reuniones mensuales y mintiendo con descaro sobre
los arreglos y refacciones de los edificios escolares.
Cuando ya está por finalizar el mes, el Ministerio de
Educación decidió volver a las mesas de acuerdos con Docentes Unidos a cuyos
delegados citó para el 30 de junio de este mes, a las 10:00, en la sede de esa
cartera en la Casa de Gobierno, en Grand Bourg.
Seguramente allí, los representantes del Gobierno reiterarán
la falta de fondos para aumentar el salario docente pero quedarán, sin dudas,
cortos de explicación respecto del medio aguinaldo que fue abonado en abierta
contradicción a las leyes laborales ya que no se consideraron los “montos en
negro” (la mayor parte del salario docente) para pagar el 50% del sueldo de
bolsillo como aguinaldo.
Por el contrario, el Gobierno llegó a pagar no más de $1.000
por ese ítem que resulta fundamental para cualquier trabajador.
La citación del Ministerio de Educación para el 30 de este mes, no parece enmarcarse
en un atisbo de solución, sino en la prolongación de las conversaciones, ante
la sólida advertencia de los docentes de no volver a las aulas luego de las
vacaciones de julio que comenzarán el 7 de julio próximo y se prolongarán hasta
el 21 del mismo mes. Por lo pronto, esta decisión será ratificada o no (según
la respuesta del Gobierno), en la asamblea que los maestros realizarán el 5 de
julio en Rosario de la Frontera.
En el Gobierno parecen haber tomado conciencia de que, si al
culminar las vacaciones de invierno las clases no se reinician, se perderá el
año y deberán apelarse a una batería de herramientas entre las que se incluyen,
la promoción automática lo que producirá un retroceso en el sistema de
aprendizaje de los alumnos y la apertura de una nueva crisis en la educación de
la provincia.
Además, ya el Gobierno no encuentra manera de frenar las
manifestaciones y los “acampes” de la docencia, que ya han tomado entidad
nacional y, de este modo, quedan todos las estrategias políticas de Juan Manuel
Urtubey totalmente alteradas.
© Agensur.info
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