miércoles, 28 de mayo de 2014

Capitanich busca evitar el paro bancario con exigencias a Alperovich

Los bancarios ratificaron el paro de
este jueves en todo el país.
Tucumán A fin de tratar de evitar el paro nacional bancario convocado para este jueves, el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, le pidió al gobernador de Tucumán, José Alperovich, que eche al interventor de la Caja Popular de Ahorros, Armando Cortalezzi. La presencia en ese organismo de Cortalezzi es cuestionada por los bancarios tucumanos que fueron duramente reprimidos cuando reclamaban por la reincorporación de 36 despedidos. El paro es en repudio a esa represión.

El jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, prometió este miércoles realizar el "máximo esfuerzo" para frenar el paro nacional que anunció para el jueves la Asociación Bancaria en repudio a la brutal represión que sufrieron en Tucumán, cuando reclamaban la reincorporación de 36 despedidos de la Caja Popular de Ahorros (CPA).

Ese "máximo esfuerzo" incluyó un pedido directo de Capitanich para que el gobernador tucumano José Alperovich eche al interventor de ese organismo, Armando "Cacho" Cortalezzi, severamente cuestionado por los bancarios. De hecho, su salida es una de las exigencias del gremio que conduce a nivel nacional Sergio Palazzo.

Según el diario La Gaceta, en diálogo telefónico con Capitanich, Alperovich habría rechazado la posibilidad de remover al funcionario, pero de todos modos en el gobierno tucumano nadie se animaba a confirmar su continuidad, supeditada a las presiones de la Casa Rosada.

En las tratativas también Capitanich habría exigido la reincorporación de los 36 trabajadores despedidos, algo que ya había ordenado el año pasado el Ministerio de Trabajo, pero que Alperovich se niega a cumplir.

Al respecto, el gremio desmintió que les hayan ofrecido reincorporar a algunos trabajadores en la CPA y a otros en diferentes reparticiones estatales. "La propuesta del gobierno provincial no existe. Ganan tiempo y le mienten al gobierno nacional", afirmó la seccional tucumana de La Bancaria.

Lo cierto es que más allá del esfuerzo de Capitanich, el secretario de prensa del gremio Eduardo Berrozpe ratificó la medida y se quejó por la actitud condescendiente de la Casa Rosada con Alperovich.

"Estoy muy apenado por esta situación, que no haya una condena a Alperovich, que hace lo que quiere", dijo Berrozpe en Radio Belgrano. "Yo respaldo a Cristina Kirchner y respaldé a Néstor Kirchner, pero no con los Alperovich al lado y menos con este tipo de ministros, que se hacen los boludos como el señor Randazzo y el señor Manzur", lanzó el bancario.

LPO reveló que el motivo real de la pelea entre Alperovich y La Bancaria es de vieja data y tiene que ver con el control de la Caja Popular de Ahorros.

En 2003, poco después de asumir, Alperovich intervino al organismo y desplazó al entonces titular Carlos Cisneros, hoy secretario de Administración del gremio a nivel nacional y quien maneja los hilos de la Asociación Bancaria en Tucumán. Alperovich lo acusaba entonces de responder al ex gobernador Julio Miranda y hoy dice que está detrás de la candidatura del radical José Cano.

La CPA, que todavía sigue intervenida, es una fenomenal caja por donde pasan cientos de millones de pesos por mes. Además de dedicarse a financiar proyectos productivos y dar créditos a empresas y empleados públicos, la CPA maneja los recursos de la Lotería provincial. En la oposición dicen que Alperovich utiliza discrecionalmente el organismo y usa fondos para tapar el déficit fiscal.

Eso explica que Alperovich siempre haya designado a interventores de su absoluta confianza, como “Cacho” Cortalezzi. Por ese cargo pasaron por ejemplo los actuales ministros del Interior, Osvaldo Jaldo, y de Seguridad, Jorge Gassenbauer, dos hombres del círculo más cercano al gobernador y a quienes se menciona como sus posibles sucesores en 2015.

Antes de desembarcar en la CPA en 2012 (cuando Eduardo El Éter debido renunciar también por un conflicto con La Bancaria), Cortalezzi era el vicepresidente primero de la Legislatura y fue designado con la misión de frenar a Cisneros.

Es por eso que uno de sus intentos fue tratar de cambiar a los trabajadores de la CPA de la rama bancaria a la estatal, entre otras maniobras destinadas a perjudicar el gremio, que denuncia que el motivo de los 36 despedidos es porque los trabajadores no respondían a Cortalezzi.

El interventor de la CPA ha sido denunciado por la Asociación Bancaria por motivos tan disímiles como manejo irregular de fondos, enriquecimiento, amenazas, fraude electoral y hasta fue acusado de “proxeneta”, lo que revela lo feroz de la disputa.

Informe: LPO

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