Juan Cabandié le pidió a los policías que le devuelvan la luz a su barrio. |
Nacionales – Juan Cabandié, el dirigente de La Cámpora de Máximo Kirchner, no deja de sumar estupideces a cada paso que da: se apareció en la reunión del
comité de crisis para pedirles a los policías que le devuelvan la luz a su
barrio mientras que en el resto de la ciudad se registraban más de 200 interrupciones
de calles por los cortes de luz que afectaban en ese momento a más de 60 mil
personas. Lo insólito es que en los lugares para los que pedía Cabandié, no
había cortes de luz.
La Cámpora se ausentó por completo de la ayuda a los
damnificados por los cortes de luz, pero, fiel a su costumbre, no pasó
inadvertida: Juan Cabandié se apareció en pleno comité de crisis para pedir por
su barrio, ante la mirada atónita de los policías.
Como adelantó LPO,
la agrupación de Máximo Kirchner no quiso tomar parte de los equipos de ayuda
porque a diferencia de lo ocurrido tras la inundación de La Plata, esta vez no
le permitían moverse con pecheras que los identifiquen.
Según pudo saber LPO,
la orden la impuso Sergio Berni a cargo del comité de crisis junto a efectivos
de la policía federal y también de la metropolitana.
Para sorpresa de muchos, ambas fuerzas acuerdan tareas sin
problemas, tanto es así que comparten sala de situación.
Experimentado, el secretario de Seguridad les explicó a los
camporistas que no era conveniente que se identificaran en las ayudas porque la
gente estaba muy furiosa e iba a agredirlos.
“Lo mejor es que se muestren instituciones que todavía
respeta la sociedad, como Cruz Roja, Cascos Azules o la Gendarmería”, les
explicó.
Al no poder sacar rédito político, La Cámpora decidió
desaparecer de escena, como adelantó LPO ayer.
Pero Cabandié se tenía una guardada. Se apareció a horas de
empezada una reunión del Comité de crisis, en el edificio que la policía federal
tiene en Virrey Cevallos y Moreno, en barrio Congreso.
“Tenemos que resolver dos problemas”, exigió Cabandié,
acompañado de dos jóvenes militantes.
“El primero es el barrio Santa Rita (en las calles Coronel
Díaz y Beláustegui donde vive). Me lo tienen que resolver porque la gente me
está puteando”, reclamó.
“Y tengo muy caliente a la gente del Club Imperio. Me
vinieron a putear y se me está dando vuelta la comisión directiva”, fue la
explicación de su problema.
Los policías no salían de su asombro: en ese momento había
en la ciudad más de 200 cortes de calle por falta de luz con una afectación que
alcanzó a 60 mil personas.
Lo más insólito llegó después: cuando fueron a controlar la
sala de situación, la zona mencionada tenía luz normalmente.
Buscando respuesta, Cabandié miró a sus jóvenes
acompañantes. “Fijate lo que me dicen, porque me están tirando boludeces”,
advirtió.
Seco, con la soberbia que dejó expuesta en aquel cruce que
tuvo con la inspectora de tránsito de Lomas de Zamora, siguió con sus reclamos
como si nada hubiera ocurrido.
“Tenemos otro quilombo en Juan bautista Alberdi y
Castañares”, informó. Esta vez la cámara mostró a los vecinos cortando la calle
y quemando los containeres de basura.
Cabandié se echó atrás y comenzó con sus propuestas.
“Tendríamos que llevar a los bomberos”, sugirió. Atónitos, los policías
debieron informarle las precauciones tomadas antes de su llegada a la reunión.
“Tratamos de evitar que vayan bomberos si prenden fuego porque
los van a enfrentar. Una vez que tiene luz, la gente misma lo apaga”, le
explicaron. Cabandié insinuó entender y se fue de la reunión.
Informe: LPO
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