En Mendoza, el Frente de Izquierda le pelea una banca nacional al Partido Justicialista

El izquierdista Nicolás del Caño le
discute una banca nacional al PJ.

Nacionales – Según una encuesta que se conoció en Mendoza este fin de semana, el Frente de Izquierda está a apenas dos puntos de obtener una banca al Congreso Nacional, a costa del Partido Justicialista que sólo lograría un escaño. El radicalismo, por su parte, obtendría tres bancas. El panorama es bastante importante para la izquierda mendocina, mientras que el justicialismo atraviesa una de sus peores pesadillas si se concreta la pérdida de una de las bancas en juego.

En el primer sondeo hecho público por el oficialismo mendocino, se ratifica el gran momento del Frente de Izquierda en Mendoza, a dos puntos de lograr por primera vez en su historia, conseguir una banca en el Congreso de la Nación. Sería a costa del segundo candidato oficial, Omar Félix, quien se quedaría afuera. El radicalismo, asimismo, obtendría los tres primeros lugares, muy cómodo, con más de 45% de los votos.

Estas conclusiones se desprenden de una encuesta realizada por el consultor peronista Santiago Alé a través de su firma Diagnóstico y Análisis, filtrada a algunos periodistas locales este fin de semana.

Según el sondeo, de 1.332 casos realizada la primera semana se septiembre, Cobos estaría superando por dos puntos su performance en las PASO, llegando a 45,98% de preferencia. En el segundo lugar, se ubica el justicialista Alejandro Abraham, con casi 31%, cinco puntos más que los logrados en las primarias. En tercer lugar, y acá viene la sorpresa y la preocupación para el PJ, el izquierdista Nicolás del Caño, con 13,92%, casi duplicando sus votos en las PASO.

En un segundo pelotón se ubican Luis Rosales, del Partido Demócrata, y Daniel Cassia, del peronismo disidente, con 3,83% de intención de voto cada uno. Por último, cierra el representante del FAP, Alberto Montbrun, con 1,39%.

El justicialismo mendocino tiene dos pesadillas que podrían concretarse el 27 de octubre: por un lado, que el radicalismo supere el 50% de los votos y así logre meter cuatro diputados, lo que sería inédito en Mendoza desde 1983. La otra, que Del Caño llegue mejore aún más la intención de votos y le arrebate al PJ la segunda banca, descontando que la UCR meterá tres.

Según este sondeo del oficialismo, la segunda posibilidad es la más probable, y de ahí deriva unas de las peleas más resonantes de las varias que ha habido en últimas semanas puertas adentro del PJ, aún en shock por la paliza de las PASO.

Cuando el vice Carlos Ciurca y sus hombres más cercanos, los intendentes de Guaymallén y Las Herras, Alejandro Abraham y Rubén Miranda, avanzaron en un acuerdo con el disidente Cassia, quien pegó el grito en el cielo fue Omar Félix, el segundo de la lista justamente detrás de Abraham. Es que el actual diputado nacional lo que menos necesita es que algún esquema de alianzas ponga en juego votos imprescindibles para renovar su banca.

La alianza con Cassia incluía hacer listas espejos en Las Heras y Guaymallén en la categoría de concejales. Cuando Félix se enteró amenazó con renunciar y llevar al peronismo a un cataclismo interno. Se echaron para atrás Abraham y Miranda en la negociación, pero la herida está abierta. El temor de Félix era que se perdieran votos propios de ciudadanos que preferían a Cassia en el Congreso.

Asimismo, el diputado nacionales, en intensas discusiones, no dejó pasar un detalle que para el ADN peronista es fundamental: hizo lo que tenía que hacer, en su departamento, San Rafael, ganó, cosa que no pudo hacer ni Abraham en Guaymallén ni Miranda en Las Heras. Es más, en estas dos comunas, la diferencia a favor de Cobos fue abrumadora.

Ahora, la esperanza del PJ, más allá de sus graves quiebres internos, está depositada en los intendentes, que se juegan la gobernabilidad de sus municipios, y al mismo tiempo en que Nicolás del Caño no siga mejorando en la intención de voto de los mendocinos.

Informe: LPO