Por Martín Risso Patrón |
Entrañable
Con
su arquitectura finisecular del XIX, de rasgos italianizantes,
estrictamente aplicados a los fines prácticos de su construcción [por
aplicación de los principios científicos y técnicos de la arquitectura
sanitaria de la época], y de una belleza clásica profundamente enraizada en el
entorno, nuestra casa de salud más importante durante todo el siglo XX nos
muestra, tanto en su fachada como en sus pórticos, salas y dependencias
internas, su entrañable belleza.
Punto culminante de mis inopinadas visitas, siempre es la adusta capilla, pequeña, pero con coro y esa atmósfera severa que domina la Casa.
Punto culminante de mis inopinadas visitas, siempre es la adusta capilla, pequeña, pero con coro y esa atmósfera severa que domina la Casa.
Los
internatorios, los consultorios y, repito, sus bellos pórticos,
tienen algo qué decir de un mejor pasado.
Las
intervenciones edilicias sucesivas y motivadas por acuciantes necesidades de
espacio físico, lo afearon tanto, tanto a mi hospital, que en
algunos puntos parece una triste muestra de la improvisación fría, estúpida y
desganada de los gobiernos de turno y de técnicos que sólo tuvieron el mandato
de hacer sin conservar, construir destruyendo, y lo que es peor, ahorrar
a costa de cualquier cosa.
En
pleno siglo 21, tanta improvisación, profundizada hoy mismo, ha
pasado su factura.
Reseña
Con
el nombre de Hospital Señor del Milagro, fue inaugurado
el14 de Abril de 1895, "para que los enfermos acudan para su
curación, en el cual, junto a los remedios de la ciencia, encuentren los
consuelos del espíritu prodigados por abnegadas mujeres que se llamaban las
hermanas de la caridad [...]” rezan sus datos fundacionales; la
edificación se ubicó en una manzana de terreno “en el campo de la Cruz,
donado por Don Federico Stuard”. Su arquitecto fue el Italiano Carlos
Macchi, quien contó con “recursos obtenidos por la incansable labor de la
presidenta de la Sociedad de Beneficencia, Sra. Francisca Uriburu de Castro”,
prosigue la reseña.
El
Hospital depende del ministerio de salud pública de la provincia de Salta;
“desde su fundación ha desempeñado una importante labor en la asistencia a
personas con enfermedades infectocontagiosas. En el año 2000,obtuvo el premio a
la calidad de los servicios, primera edición.
El
gobierno salteño, que no escatima esfuerzos para autorrereferenciarse,
escribe en marzo del año 2012, en el blog dedicado al Hospital, lo
siguiente: “Estamos comprometidos en el mejoramiento de la calidad de vida
de las personas enfermas, con la lucha contra las afecciones que disminuyen las
expectativas de vida de nuestra población y con la salud de la comunidad”.
Eso nomás, un compromiso, porque, lo que en realidad sucede, es que el
Hospital, se viene literalmente abajo, no por viejo o decrépito,
sino por descuido de la burocracia. Lo mismo que lo
sucedido con la querida escuela “Benjamín Zorrilla”, que le ha costado a
Salta irrecuperables capitales culturales, como los enterratorios
humanos arcaicos y coloniales existentes en sus terrenos, y la destrucción
del 80% de su venerable planta edilicia, cobijadora de tanta historia,
hacia mediados de la década de los 10 de este siglo. Entre los falaces
argumentos para su destrucción: “Está vieja y se cae”,
siendo esto una supina y atroz mentira encubridora de voraces intereses
económicos.
Peligro
El
asunto es que el querido Hospital del Señor del Milagro, se cae a
pedacitos. Para hacerla breve, muy breve, pero contundente: El
lunes 6 de mayo pasado, el techo de los sanitarios de profesionales se desplomó
con estrépito, salvándose por un pelo una enfermera, y una médica que
atendía ambulatorios reumatológicos, la primera porque no alcanzó a entrar, y
la doctora por haber salido en el momento del derrumbe.
En un
simulacro de catástrofe que se hizo el año pasado, la sala de reumatología
había sido declarada zona roja [¡qué cosa, Doña Clota, con esa
expresión en boca de los funcionarios! ¿no?], pero nada cambió en cuanto a los
señalamientos de los especialistas que informaron los resultados del ejercicio.
Además
“...hay un solo baño para pacientes internados (mujeres y varones) y las
paredes se caen por falta de mantenimiento. La idea es ayudar a concientizar a
los encargados de preservar la salud de la población, sobre todo tratándose de
pacientes con enfermedades reumáticas y oncológicas”, reflexionaba
una doctora reconocida por su seriedad y tino. Un colega de ella que pasaba
durante mi última visita de las que hago siempre, le explicaba a una enfermera:
”Hemos hecho varios reclamos y el ministro Heredia que ya vio las fotos que
le llevaron... nada de nada... pero claro... no hay presupuesto para el
Hospital Viejo...”. Campanas de palo.
Fueron
entregadas al ministerio por vía de la dirección, varias notas en las que se
denuncia el estado de las condiciones edilicias del Hospital. El asunto es que
los profesionales y pacientes internados y ambulatorios del hospital del
Milagro, padecen la angustia de lo inesperado.
Además,
la historia y la memoria arquitectónica de la ciudad están siendo lesionadas
por tanta desidia. No vaya a tener el hospital del Milagro el mismo
destino que tuvo la escuela Zorrilla.
Reclamo
públicamente por su mantenimiento con criterio técnico riguroso... No a las
improvisaciones... no a los negociados con empresas de construcción... no a la
desidia y la negación hacia el trabajo de tantos profesionales que dan lo mejor
de sí para el paciente.
[Edición impresa
en Semanario “Nueva Propuesta”, Salta, viernes 17-Mayo-13]
tengo 26 años el dia 1 de agosto del 2013, yo , mi marido y mi suegra.fuimos al hospital señor del milagro viejo de salta, la atenciòn un desastre sin ganas de atener de parte del personal en general.Su puesta mente por lo menos el dr.clinico ya se de guardia o no su dever es preguntar que le pasa al pasiente y si el pasiente le dice que cre que tiene gripe el dr. deve hacer le hacer los estudios adecuados pero esto no fue asi yo tengo dos hijos menores de edad si pasa algo. ayer vi en los canales de cable de salta que murio un sr de 47 y una chica de 19 años de edad..porque no hacer lo que tienen que hacer para eso son medicos y para eso se les paga no para poner mala cara y no atende como se deve,solo les importa cobrar y nada màs.TIENEN QUE SALBAR VIDAS Y NO DEJAR MORIR AVER QUE SOLUCION DAN Y URGENTE...si me pasa algo quien se hace cargo eh pero hay gente que no hace nada pero yo si por mi hijos y por la gente que murio y esta enferma de gripe a o comun
ResponderEliminarLos médicos están cansados, ya casi no comparten con sus familias, deben trabajar muchas horas por día, se divorcian más que cualquier otro gremio.... y la culpa de quién es ?
ResponderEliminarLa gente educada usa los servicios de guardia como corresponde, no se debe consultar en una GUARDIA por un resfrió, o por una angina, o porque "ya que paso por el hospital consulto por un hongo en la piel que lo tengo hace meses" o por otras banalidades. Madruguen y saquen turnos en los centros de salud o en los consultorios de todos los hospitales.
Las GUARDIAS son servicios VITALES donde sólo se debe acudir por verdaderas enfermedades que ponen en riesgo la vida. De lo contrario el médico se agota por lo que no debe y cuando le llega una verdadera urgencia está abotagado y puede cometer errores insalvables...y lo sufrimos nosotros mismos
Seamos prudentes, solidarios, comprensivos. A Las guardias hay que protegerlas por el bien de todos los que podemos necesitarlas alguna vez
Leer la definición de Urgencias o Emergencias