Sonia Escudero dijo que la reforma judicial es "inconstitucional". |
Salta – “Este proyecto plantea un nuevo obstáculo
para los jubilados ya que se agrega una nueva instancia antes de llegar a la
Corte”, afirmó la senadora nacional por Salta, Sonia Escudero, al referirse a
la reforma judicial que obtuvo media sanción en la Cámara Alta. La legisladora
dijo que la iniciativa “afecta la
garantía constitucional de obtener un pronunciamiento judicial en un plazo
razonable, tal como lo establece la Corte Interamericana de Derechos Humanos”.
Los jubilados, “son obligados a venir a Buenos Aires para
continuar con los procesos judiciales, porque las Cámaras Federales de
Apelaciones en las provincias no tienen competencia en materia previsional; es
un tema que he querido solucionar a través de una iniciativa que impulso desde
hace tiempo en el Senado. Incluso le pedí al Secretario de Justicia de la
Nación que incluyera este tema en la reforma judicial, así estaríamos
facilitando el acceso a la justicia de los jubilados del interior del país,
pero no fui escuchada y en cambio se está creando un nuevo cuello de botella”,
aseguró la senadora nacional por Salta, Sonia Escudero, al explicar uno de los
motivos por los cuales votó en contra del proyecto de reforma judicial aprobado
el miércoles en la Cámara Alta.
La legisladora del Peronismo Federal (PF) afirmó que “este
proyecto plantea un nuevo obstáculo para los jubilados ya que se agrega una
nueva instancia antes de llegar a la Corte” y añadió que la iniciativa “afecta
la garantía constitucional de obtener un pronunciamiento judicial en un plazo
razonable, tal como lo establece la Corte Interamericana de Derechos Humanos”.
En ese sentido, Escudero expresó que el proyecto para crear
tres nuevas cámaras de Casación: en lo Civil y Comercial, en lo Contencioso
Administrativo, y de Trabajo y Seguridad Social “no va
tener un ningún impacto en la realidad argentina, porque la verdadera
necesidad es que la justicia funcione”.
La senadora señaló, además, que “el proyecto es
inconstitucional porque este Congreso no tiene competencia para crearle a la
justicia ordinaria de la Ciudad de Buenos Aires una nueva instancia judicial” y
detalló que “la improvisación y el apuro con el que se hizo el proyecto que
sólo crea un cuello de botella que alargará aún más los procesos judiciales”.
Aseguró, además, que “esta reforma no viene a favorecer el
acceso de pobres y marginados a los tribunales, no combate los formalismos, y
sólo refuerza la posición de los más poderosos, las corporaciones que pueden
aguantar procesos judiciales más largos. Los sectores de menores ingresos, en
cambio, son forzados a negociar para terminar el proceso cuanto antes”.
Para Escudero, la iniciativa kirchnerista no contempla la
creación de nuevos juzgados federales en el interior del país y dijo que, por
ejemplo, el juez de Orán tiene 8 mil causas. “Aquí se dice que había que
aliviar la Suprema Corte porque tiene 9 mil causas y son 7 jueces, ¿cómo puede
un juez hacer justicia cuando la droga avanza a pasos agigantados en el norte
del país?”, se preguntó la senadora salteña y agregó que “no sólo no hay más
jueces, no hemos conseguido todavía que el Consejo de la Magistratura avance en
la puesta en marcha del juzgado de Tartagal, una ley que este Congreso aprobó
en 2011”.
Para Escudero, “este proyecto se relaciona con la reforma
del Consejo de la Magistratura, tiene que ver con la obsesión de este gobierno en su lucha contra el grupo Clarín,
que tiene a este Congreso como rehén, sin posibilidad de mejorar los proyectos,
ni sancionar las leyes que el país necesita”.
Informe: Agensur.info
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