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| Hugo Moyano fue reelecto al frente de la CGT, con lo que se concretó la fractura de esa central obrera. (Foto: DyN) |
En un total hermetismo y sin acceso para la prensa, los
delegados de los gremios afines a Hugo Moyano finalmente lo reeligieron como
secretario general de la Confederación General del Trabajo, en un congreso
normalizador que se realizó en el microestadio del Club Ferrocarril Oeste, en
el barrio porteño de Caballito.
Los periodistas no pudieron ingresar a la reunión de los
sindicalistas y debieron permanecer en las inmediaciones; sólo podrán estar
presentes en el acto que se realizará al término del congreso, en el estadio de
fútbol de dicho club. Desde el antimoyanismo aseguraban, con sorna, que la
prohibición al ingreso de la prensa era una estrategia para esconder el fracaso
de Moyano, que "cada día pierde más aliados".
En ese sentido, esta mañana a primera hora, el líder
camionero sufrió una nueva baja en sus filas: el secretario de Asuntos
Institucionales de la
Unión Ferroviaria (UF), Mario Rodríguez, confirmó que su
gremio no participaría del congreso. "Todo lo que haya hecho Moyano no
tiene validez. Este congreso está impugnado", remarcó.
Y también criticó que "cuatro o cinco gremios quieran
adueñarse de un sector importante en representación de trabajadores". Así,
la UF no abandona
a Moyano, que mantiene su poder de convocatoria, pero ya quedó prácticamente
sin aliados de fuste, por fuera de su alianza con Gerónimo "Momo"
Venegas.
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Además de los peones rurales -y de Camioneros-, Moyano tiene
el acompañamiento de los gremios de bancarios, judiciales, municipales,
canillitas, dragado y balizamiento, cárnicos, panaderos, pilotos de avión y
motoqueros. Se trata, en general, de gremios medianos o pequeños. Los
sindicatos más grandes ya abandonaron las filas del moyanismo.
Como sucedió en el acto de Plaza de Mayo, para ampliar su
base de apoyos, el camionero se respaldo en líneas internas o "rebeldes"
de grandes gremios. Apoyan sus reclamos los delegados del Sarmiento, como
"El Pollo" Sobrero, pero la Unión Ferroviaria
lo abandonó. Lo mismo sucede con los taxistas: en Ferro hay peones que
responden a José Ibarra, pero Omar Viviani ya no lo secunda.
Acaso la presencia que más dolores de cabeza le pueda
representar en un futuro cercano al Gobierno sea la de Guillermo Pereyra,
titular del Sindicato de Petróleo y Gas Privado de Río Negro, Neuquén y La Pampa , y representante de
los gremios en el directorio de YPF.
Este dirigente, que está por fuera del gremio que responde a Alberto
Roberti, se convirtió en el secretario adjunto de la CGT.
El ruralista Gerónimo Venegas como secretario de Interior;
el municipal Amado Genta, en Finanzas; el judicial Julio Piumato, en Derechos
Humanos; Juan Carlos Schmid, de Dragado y Balizamiento, en Relaciones
Internacionales; el canillita Omar Plaini en Prensa y Miguel Angel Paniagua, de
Espectáculos, en la
Secretaría Gremial.
Antes de la votación para elegir las nuevas autoridades, se
votó por unanimidad el ingreso de 47 nuevas organizaciones sindicales a la
central obrera de la calle Azopardo. Esta jugada había sido denunciada por el
antimoyanismo como una estrategia del camionero para garantizar su reelección.
Desde el moyanismo aseguran que la CGT contaba en total -contando
a los "Gordos", "Independientes" y ex aliados a Moyano- con
1610 delegados habilitados para la votación. Y a partir del ingreso de estos
nuevos gremios, se sumaron unos 241 delegados más. Es decir, estaban en
condiciones de votar alrededor de 1851 delegados.
Según explicó un gremialista a LPO, los organizados del
congreso normalizador aseguran que en Ferro votaron 1008 delegados, es decir un
54,48%. Moyano, entonces, asegura haber ganado con el mismo porcentaje que ganó
Cristina Kirchner.
Informe: LPO
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